lunes, octubre 18, 2010

IZZ: THE DARKENED ROOM

IZZ: THE DARKENED ROOM (2009, DOONE RECORDS)

1. Swallow our pride

2. Day of innocence

3. Regret

4. Can’t feel the earth, part I

5. Ticking away

6. Can’t feel the earth, part II

7. Stumbling

8. The message

9. 23 minutes of tragedy

10. Can’t feel the earth, part III

Tom Galgano: teclados, voz

Paul Bremner: guitarras eléctricas y acústicas

Brian Coralian: batería electrónica y acústica, percusión

Greg DiMiceli, batería y percusión

John Galgano, bajo, guitarras acústicas y eléctricas, voz, teclados

Anmarie Byrnes: voz

5/5

Tras una carrera inteligente de los neoyorquinos, a los que en un principio absurdamente se diagnóstico como lo que no eran, dan un paso de gigante, tras un excelso álbum, My River Flows (2005), en el que dejan bastante claro sus intenciones de crear un rock sinfónico moderno, de altísima categoría, instrumentación, variedad de ideas y gran composición. Y lo consiguen con esta obra absolutamente maestra en la que además del estilo propio nos evocan retazos sugerentes de sus influencias. Influencias que van desde Genesis, Pink Floyd, Emerson, Lake & Palmer o Yes, hasta recrear sonidos actuales propios de los suecos Flower Kings.

Un disco sin desperdicio ninguno que se convierte en cabecera de los próximos años, me aventuro a decir que de próximas generaciones, en el que la instrumentación roza la perfección, sino es que la logra, con unos músicos que se erigen en unos nuevos inquilinos del Olimpo del rock progresivo de todos los tiempos.

Pianos sublimes y elegantes, guitarras etéreas delicadas con momentos de sonido americano sentidos con fuerza absoluta, bajo convertido en pulso de corazón de todo el ritmo acompañado de una batería alegre e investigadora, voces cuidadas hasta la perfección y teclados oníricos, conforman el mundo mágico de este supergrupo actual de músicos, más o menos anónimos, que trabajan con ahínco los circuitos progresivos, para gozo de los verdaderos seguidores del rock inteligente.

Izz es el grupo que muchos añorábamos desde hace ya muchos, demasiados, años. Ya era hora de que propuestas inteligentes surgieran de cualquier parte de este planeta. Con los de Nueva York estamos de enhorabuena. Sin paliativos.

No hay comentarios :